Otro día.

Una vez un hombre grande me dijo que de mi tristeza muchas almas que padecían se alimentarían  luego se retobo y me miro, me sonrió y me dijo que tenia la sonrisa mas maravillosa que jamas halla podido ver, que la usara para espantar a quienes eran almas que se conducían tristes por la vida, lo mire atentamente y me dijo:

-Las penas y heridas en el alma jamas sanan, jamas se recuperan, pero solo vos podes cubrirlas para que solo quien vos digas la remueva y vea tu esencia, una niña dolida que sufrió que lucho y que hoy vive, que con una sonrisa cambia el día de otras personas, que ante una tristeza ajena responde con un consejo, con una palabra de aliento, con un abrazo.

Quienes mas en esta vida te aman, por vos darán a capa, espada y hasta la muerte su felicidad por la tuya, no hagas con ellos un desperdicio de valor y amor, sino un muro para que nadie mas te dañe, crea en ti lo llamado empatía  sufre con los demás lo que realmente duele y no halla vuelta atrás, dale fuerzas si aun hay tiempo de recuperar lo perdido.

Juega con quienes mas quieren verte mal, hasta cansarlos y que se alejen de tu lado, diles que vuelvan cuando pronto tu de tantos golpes estés cansada, jamas sabrán que no bajaras la cabeza, ellos solo creen que entraras en su circulo por tantos golpes dados.

Jamas bajes la cabeza y ponte en guardia cuando alguien quiera tocar tus sentimientos, solo ellos en ti despiertan la vida y la muerte, la tristeza y la alegría, lo bonito y lo feo.

Ya que tienes un ángel aprovéchalo pídele que te cuide mas que nadie, pídele que te ayude a retomar el camino cuando te desesperes y nadie este ahí para ti.

Yo camine solo muchos años, y perdí mas que lo que gane. Choque con la misma piedra una y otra vez, discutí con el destino para que me pusiera en mi camino alguien que me ayudara a guiarme. Cuando no me daba cuenta que quien camina soy yo. 

Podes tener una mano, un brazo para sostenerte, una caricia que te haga sentir bien cuando nada lo este realmente, pero sola vas a caminar cada lugar que decidas transcurrir, pero por favor no dejes que nada te detenga, no cortes el camino y el destino de tantas otras vidas en las cuales vas a pertenecer, vas a ser pasajera, vas a pasar y saludar y causar una sonrisa.

Al fin y al cabo somos humanos resolvió decir entre suspiros. Estamos creados para sentir, para buscarnos, encontrarnos y dejarnos ir...
Se alejo unos centímetros y las lagrimas comenzaron a correr por sus mejillas mientras se desvanecían al caer.